Lareñas en el Velatorio de la Sardina

Por: Genesis Pérez C y Juliana K. Nieves Graulau  

El domingo, 27 de febrero de 2022, ante un día lleno de estudiar para los exámenes de mitad de termino, decidimos tomar un descanso y asistir al Velatorio de la Sardina. No queríamos perdernos la oportunidad de ver el famoso velatorio y el desfile pero sobre todo, queríamos ver a nuestro amigo Carlos de recepción tocar junto a su banda. Teníamos una inmensa curiosidad de como se culminaba el fin de semana del Carnaval. 

El Velatorio de la Sardina fue una de las cosas más divertidas que hemos hecho en Toledo. Comenzamos en la Plaza de Ayuntamiento donde se acumulaba la gente y los personajes para el desfile. Observábamos como llegaban más y más personas, y como el aire se llenaba de felicidad y emoción para ver todo comenzar. Nuestras ojos reflejaban la sonrisa que las mascarillas cubrían. De momento,  música envolvía la plaza indicando el comienzo de este gran actividad. Orgullosamente y muy felices encontramos a Carlos, y vimos como desfilaban los personajes del Velatorio. 

Abriendo el camino se encontraba la banda tocando, donde Carlos hacia su debut en primera fila. Luego le seguían anunciando el velatorio, con carteles y humo, un grupo vestido con batas negras y mascaras con pico puntiagudo.  En tercer lugar, llevaban la colorida sardina. A las dos nos parecieron demasiado llamativos y diferentes los colores de la sardina. Jamás imaginamos que sería así. Ya luego pasaba un grupo de personas vestidas de luto agitando pañuelos simulando el sufriendo por la sardina. El pueblo les seguía con afán y alegría de celebrar el carnaval luego de estos dos años tan difíciles.

Después de verlos pasar, empezábamos a correr a través de los calles de Toledo para alcanzar a ver el desfile nuevamente desde la Plaza Zocodover. Seguimos así toda la tarde, parecía que estábamos persiguiendo a Carlos, pero valió la pena por que en la tercera vez que vimos el desfile desde la Plaza de la Magdalena, logramos tomarnos una foto con él. 

                                            De izquierda a derecha: Carlos, Juliana y Genesis

Nos dirigimos para ver el 'Gran Espectáculo' de fuegos artificiales en la Plaza del Embarcadero / Barco de Pasaje.  Como prometía su promoción, la verdad es que sí fue un espectáculo inolvidable. Para ambas, fue una experiencia única. Conseguimos lugar cerca del embarcadero donde tuvimos la vista perfecta a la sardina y a los fuegos artificiales. Ambas nos mirábamos y decíamos "WOW" del asombro que teníamos ante tan impresionante espectáculo. 

Ver como los fuegos artificiales se reflejaban en el sereno Río Tajo, irradiaba una alegría inmensurable a nosotras. Al ser testigos de este gran evento, nos entró la reflexión de cuan duro hemos trabajado para llegar a Toledo y cuan agradecidas estamos de estar aquí y disfrutar de estos actividades especiales.  Asistir al Velatorio juntas fortaleció grandemente nuestra amistad y quisiéramos poder regresar cada año para verlo. Animamos a todos los futuros alumnos de la Fundación a permanecer en Toledo para el fin de semana del Carnaval y disfrutarlo al máximo. Si no tienes disfraz, no pasa nada porque la Fundación tiene varios que pueden utilizar.  No se van a arrepentir y es una excelente oportunidad de integrarse a las costumbres de la mágica ciudad de Toledo. 

Toledo nos ha regalado mucho desde que llegamos. Desde experiencias como esta hasta amistades y momento inolvidables.  Ambas nos conocimos en la Fundación. Genesis estudia en la Universidad Interamericana de Puerto Rico-Arecibo y Juliana en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico- Ponce. Pero lo más sorprendente es que al hablar por primera vez, nos dimos cuenta que ambas somos de Lares. Un pueblo pequeño, montañoso y bello de Puerto Rico.  Las Lareñas aventuran por  España con papelones y buenas vibras pero sobre todo creando lindas memorias y forjando una linda amistad.