BORICUA LLEGANDO A ESPAÑA

 Mi Viaje a Portugal

por: Amanda Marie Alicea Albizu

Viajar  es una de mis metas, y cuando supe que vendría a España a estudiar me propuse viajar tanto como me sea posible. El pasado fin de semana tuve la oportunidad de viajar a Portugal junto con mis amigos y conocer cosas nuevas. A la hora de reservar nuestro trasporte hacia Lisboa no tuvimos suerte de conseguir un pasaje de avión accesible debido a la proximidad de las fechas, pero conseguimos pasajes de bus. El viaje tanto de ida como el de vuelta fue muy duro ya que son como unas seis horas y por lo menos en lo personal un poco incomodo. En el viaje de ida hacia Lisboa nos tocó sentarnos separados porque el bus venia desde Madrid con bastantes pasajeros. Viajamos de noche y yo no pude dormir nada además de estar incomoda. Una vez que llegamos a Lisboa fuimos a nuestro hospedaje ya que cuando informamos a la anfitriona del Airbnb que llegábamos temprano, nos permitió hacer el check-in antes de la hora establecida, por lo que no tuvimos que cargar con nuestros bultos durante el día. Luego salimos a desayunar juntos al lado de nuestro hospedaje, para después comenzar nuestro recorrido. Nuestra primera parada fue en el Mirador de Santa Lucia, en donde pudimos observar una vista espectacular del rio Tajo. Luego caminamos hasta llegar a la Catedral de Lisboa la cual solo observamos desde afuera debido a que no tenían descuento de estudiantes y la entrada era un poco costosa, además de que pudimos apreciar un poco el interior desde la puerta. Después caminamos hasta llegar al arco Rua Augusta, en donde pudimos ver una arquitectura impresionante y pudimos sentarnos a la orilla del rio Tajo a disfrutar de una piña colada. Al terminar decidimos ir al Mercado Da Ribeira, para comer, allí encontramos una gran variedad de restaurantes y la comida estaba muy buena. Mas adelante decidimos ir a ver la torre de Belem e ir a probar los famosos Pastéis de Belem, un postre muy bueno que recomiendo mucho que se den la oportunidad de probar. En nuestro camino hacia los Pastéis vimos el Monasterio de San Jerónimo y al final decidimos regresar hasta nuestro hospedaje ya que estábamos muy cansados por el viaje.

                

Al día siguiente desayunamos en el restaurante Deli Deluxe y habíamos decidido visitar Sintra por una recomendación que nos hicieron y puedo decir que fue el mejor día de nuestro viaje a Portugal. Al llegar estaba lloviendo, pero esto no arruino nuestros planes porque conocimos a Leonardo un guía turístico que nos ofreció llevarnos a ver todos los monumentos de Sintra por 35€ además de llevarnos a las costas y a nuestra última parada en Cascáis. Los monumentos que visitamos fueron el Palacio Nacional de la Peña, la Quinta de Regaleira Garden, las Costas de Caneiro, la Praia de Adraga, el Cabo da Roca y mientras íbamos en su Jeep pudimos ver otros monumentos a los que no podíamos entrar. 

            

El tour que nos brindo fue muy conveniente por varias razones: la primera porque estaba lloviendo y no íbamos a poder ir a muchos lugares, la segunda porque íbamos a tener que esperar y gastar 10€ en bus para llegar cerca de los monumentos y caminar hasta ellos, la tercera porque nos pareció un buen plan el que Leonardo nos planteó. Por lo poco que estuvimos con el pudimos darnos cuenta de que era una persona muy amable, trabajador y que ama lo que hace, gracioso y muy dinámico. En lo personal gracias a Leonardo pude vivir experiencias que no había vivido. Al final del día considero que fueron los 35€ mejores invertidos del viaje. Debido al clima lluvioso hacia bastante frio, pero eso no impidió que disfrutáramos de nuestro día. Al día siguiente era nuestro día de regreso a Toledo, nuestra salida era a las 9:40pm. Dejamos el Airbnb en la mañana, fuimos a desayunar al restaurante Amelia Lisboa, luego decidimos dejar nuestros bultos en una consigna para poder estar más cómodos durante las últimas horas en Portugal. Visitamos el castillo San Jorge pero solo lo vimos desde afuera, luego caminamos hasta llegar al Mirador del Sol en donde tomamos un tranvía y luego decidimos volver a comer Pastéis de Belem para después recoger nuestras cosas en la consigna para dirigirnos a la estación de autobuses. Y así fue como termino nuestro viaje a Portugal.