El Laberinto del Casco de Toledo

Adhara H. Hernández Rodriguez Universidad Interamericana, Recinto de Aguadilla P.R.
Como ya les habrán explicado, Toledo se divide en dos partes: la parte moderna y la parte histórica (donde se encuentra FOGM). Ambas partes cuentan con un encanto singular, en el que cada rincón te hace sentir como en una película o un cuento irreal. No obstante, me quiero enfocar en el lado histórico de Toledo, o mejor conocido como el "Casco de Toledo". Fue impresionante, pero imponente al momento de poner mi primer pie en esta hermosa parte de la ciudad. ¡Claro que es imponente! Pues al llegar ves la belleza, mas al adentrarse solo percibes un laberinto. Pero el laberinto más precioso en el cual me he adentrado.
Mi primera pregunta después de mi reacción inicial fue: "¿Cómo voy a hacer para no perderme en este lugar?". Algunas horas después, respondieron mi pregunta. Es sencillo, solo te tienes que perder. Sé que suena contradictorio, pero créanme esa preocupación por no saber dónde estás va a desaparecer cuando comiences a descubrir nuevos lugares, nuevos encantos, nuevas personas... Cuando piensas que ya exploraste todo, encuentras un nuevo callejón que te lleva a un nuevo lugar que por más que te acostumbres a la estancia aquí, te dejara sin aliento.
Para los que aún están preocupados, quédense tranquilos, que aquí o llegas al rio Tajo o te chocas con la pared. En todo caso "google maps" funciona a la perfección. Pero mi mayor consejo para tu estadía en el casco de Toledo: piérdete sin miedo, sumérgete en las profundidades de este imponente y hermoso laberinto.

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